lunes, 22 de septiembre de 2008

Correo del navegante

Eva Sánchez Cabot, desde Vélez Blanco (Almería), pregunta:

Ayer mismito oí a nuestra vistosa ministra de Educación decir por la tele: estamos demandando, etc. Me dio un runrún y les pregunto a vosotros ustedes, ¿es correcto?
(Amiga Eva: El verbo demandar, frecuentemente usado, no deja de ser un galicismo. Puede sustituirse, con ventaja, por “pedir”, “requerir”, “rogar”, “solicitar”, “pretender”, “intentar” y algunos más.)

Fina Francés, desde Binibeca (Menorca), nos cuenta un chiste (esto de reírnos nos viene al pelo). Y dice.
Como sé que sois amigos de los canes, va éste:
“Un amigo le dice al otro:
-Esto de la inteligencia de los perros es algo extraordinario. Dicen que algunos de ellos son más inteligentes que sus amos.
-Ya lo sabía -dice el otro-. Precisamente yo tengo uno de ésos.”


Y yéndonos de chistes, Perico Delgado nos contó ayer uno, durante la retransmisión de la Vuelta a España de las bicis, que no tiene desperdicio.
“Llega una mujer alborozadísima, frenética, toda nervios, a su casa y, gritando, le dice a su marido: “¡Felipe, Felipe, estoy como loca; que nos acaban de tocar quinientos mil euros en la Primitiva…!
“Y la pobre mujer, con la emoción -¡ag, ag…!-, sufre un infarto y se queda frita.
“El marido la contempla estoicamente y exclama: Desde luego, ¡cuando uno está en racha…!”
(Nota de Q.P.: ¡Ojo, feministas!, el chiste es reversible. El finado puede ser el marido).

1 comentario:

Anónimo dijo...

El día que como Angelina, me dé por eso, sabré que el fatídico momento, temido desde hace tiempo, ha llegado; vagaré en brazos de la madre locura.
Que conste, comprendo que a los hombres, como si se revuelca en estircol, una hembra es uma hembra y esta gusta mucho.